
El ministro de Economía, Sergio Massa, estirará su visita a Estados Unidos hasta el lunes 12 de septiembre, cuando tiene programada su reunión con la directora Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, al cierre de su gira en la cual también está previsto un viaje a Houston para reunirse con empresas petroleras. A la par de la visita de Massa, un equipo funcionarios del Palacio de Hacienda avanzará en la segunda revisión del programa con el Fondo, de la cual depende el próximo desembolso del organismo por casi 4000 millones de dólares.
Un portavoz del FMI dijo que un equipo del encabezado por el jefe de misión para la Argentina, Luis Cubeddu, se reunirá con una delegación técnica de la Argentina a partir del lunes en Washington, para redondear el trabajo sobre la segunda revisión del programa. Los equipos ya han estado trabajando en estrecha colaboración de manera virtual, y continuarán “las discusiones sobre las perspectivas macroeconómicas y sobre políticas para fortalecer la estabilidad y asegurar el cumplimiento con los objetivos del programa”, indicó el Fondo.
Un equipo del Ministerio de Economía viajará a Washington este domingo integrado por el viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein; el secretario de Hacienda, Raúl Rigo; el secretario de Coordinación, Leonardo Madcur; el secretario de Finanzas, Eduardo Setti; el vicepresidente del Banco Central, Lisandro Cleri, y el director del Indec, Marco Lavagna. Massa aterrizará después acompañado por su asesor internacional, Gustavo Martínez Pandiani, y se quedará hasta el 12 de septiembre, cuando tiene programado su encuentro con Georgieva. También se espera que participen la primera Subdirectora Gerente, Gita Gopinath, y el director del Departamento del Hemisferio Occidental, Ilan Goldfajn.
La nueva revisión del Acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF, según sus siglas en inglés) que se cerró en marzo cuando Martín Guzmán estaba al frente del Ministerio de Economía debería avanzar sin mayores dificultades ya que el Gobierno logró cumplir las metas cuantitativas a fines de junio. Pero las próximas revisiones sí presentarán un desafío mucho mayor para el oficialismo, en particular llegar a fin de año con una inyección neta a las reservas de casi 6000 millones de dólares.
Massa se comprometió al asumir a cumplir con cumplir con el déficit fiscal equivalente al 2,5% del producto bruto interno para este año pautado en el acuerdo. A su vez, su equipo trabaja en el presupuesto para el año próximo, cuando la Argentina deberá reducir la brecha fiscal al 1,9% del producto.
La visita de Massa llega en un momento crítico para la economía argentina. Las reservas languidecen y el nuevo equipo económico intenta cerrar un acuerdo con el campo para aumentar las exportaciones oleaginosas alimentar las arcas del Banco Central. El campo ya tuvo una cosecha récord este año, pero la persistente desconfianza ha estirado y profundizado la sangría del Central y ha mantenido bajo una fuerte presión al dólar. El Gobierno ha descartado una devaluación del tipo de cambio oficial como solución para intentar revertir la sangría.
Además de la necesidad imperiosa de dólares, la economía sufre una elevada inflación que economistas ya colocan arriba del 100 por ciento a fin de año. Massa y su equipo buscan calmar las expectativas con un fuerte ajuste de las cuentas fiscales, que además es una condición necesaria para cumplir con los parámetros acordados con el Fondo y mantener los desembolsos del organismo.
Además de las reuniones con el FMI, Massa y su equipo prevén encuentros con funcionarios del gobierno de Joe Biden –en la Casa Blanca y el Tesoro–, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y ejecutivos de empresas que invierten en la Argentina.