
SANTA FE.- Un doble crimen en la zona oeste de Rosario se suma a la dramática estadística que registra el Gran Rosario, la zona más poblada de la provincia. Sicarios acabaron anoche con la vida de una mujer de 53 años y su hija adolescente de 15. Ambas fallecieron debido a una “balacera estremecedora”, según relataron los vecinos, en inmediaciones del estadio mundialista de hockey.
Los investigadores no descartan que doble homicidio -que elevó a ocho las víctimas mortales de balaceras registradas desde el domingo pasado en Rosario y sus alrededores- pudiese estar vinculado con otro asesinato registrado en marzo en el barrio Los Gráficos.
Informes de las fuerzas provinciales de seguridad indicaron que alrededor de las 21, un grupo de personas no identificadas abrió fuego sobre una vivienda situada en Ugarte al 700. Después del ataque, y por la denuncia de los vecinos, la policía comprobó que en el lugar se encontraban las dos mujeres fallecidas. A su lado había un perro, la mascota de la familia, que también murió en el ataque.
Las víctimas fueron identificadas como Carmen Noemí Villalba, de 53 años, y su hija Marlén Katalina Villalba, de 15 años.
Los informes a los que tuvo acceso LA NACION indican que el ataque fue realizado por tres hombres, que tras disparar se escaparon en un auto Chevrolet Onix blanco con vidrios polarizados. Testigos agregaron que otro vehículo, un Gol gris plata, secundó al primero en el hecho.
“El ataque fue realizado con ferocidad”, dijo una fuente consultada este mediodía.
Los investigadores encontraron en el lugar 13 vainas servidas calibre 9 milímetros, otras 13 calibre .380, 4 cartuchos de escopeta calibre 12/70 y 9 balas de plomo encamisadas deformadas.
A la par, el examen médico realizado a las víctimas indicó que la chica presentaba alrededor de 28 orificios de bala; su madre recibió disparos de escopeta.
El doble crimen ocurrió a un par de cuadras del sitio donde algunos meses atrás mataron a balazos a Martín Villalba y se afirma que ambas víctimas eran parientes de ese hombre 35 años, que estaba en silla de ruedas cuando fue acribillado desde una moto la tarde del viernes 5 de marzo cerca del cruce de Yaguareté y Mateo Booz.
El caso está a cargo de la fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Georgina Pairola, quien convocó al Gabinete Criminalístico y la Brigada de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC). En principio, hay dudas en torno a si las dos mujeres vivían en la precaria vivienda frente a la cual las asesinaron.
Pocas horas después fue encontrado otro cadáver. El cuerpo estaba atado de pies y manos y con un impacto de bala en la cabeza. Para los investigadores no hay dudas que ese joven, cuyos datos aún se desconocen, fue ejecutado en el lugar del hallazgo, un descampado ubicado en la localidad de Pérez, a 12 kilómetros de Rosario y que forma parte del mismo distrito judicial.
Con este crimen, ascienden a 137 los homicidios registrados en lo que va del año en el Departamento judicial Rosario, según dio a conocer el Observatorio de Seguridad Pública.